miércoles, 12 de mayo de 2010

Mi Taller de Radio...

Eso que ves, ¿cómo lo expresarás con palabras? El mundo nos entra por los ojos pero no adquiere sentido hasta que desciende a nuestra boca.

Paul Auster



La radio es un medio de comunicación netamente atractivo, nos permite desarrollar, a través de la voz del locutor y de los efectos sonoros, nuestra imaginación. Para lograr que nuestras ideas lleguen de forma optima al receptor debemos sabernos expresar, a través de un leguaje modelo, es decir que pueda ser comprendido por todos.

Comunicar es establecer un vínculo, compartir algo con alguien. Para lograr expresar nuestras ideas tenemos que codificarlas, tenemos que convertirlas en signos materiales. Para que esto sea posible necesitamos el idioma que es un código, un sistema de signos que materializa nuestros pensamientos y emociones para que otro ser vivo pueda recibirlas y decodificarlas. Para que este mensaje que queremos trasmitir sea recibido óptimamente necesitamos que no exista ninguna clase de ruido, entendiéndose por este, cualquier cosa que no deja que el mensaje llegue plenamente al receptor, los distintos tipo de lengua, costumbres, dialectos, distractores, interferencias técnicas o idiomas son una clase de ruido que impide que el emisor despierte el interés del mensaje en el receptor.

El hablar en público no es tan fácil como se piensa, hay que aprender a modificar nuestro timbre de voz y adecuarlo a uno que sea dócil al receptor. De ahí tenemos que existe una delgada línea entre el que locuta con una voz muy seductora y atrayente, y el que escupe una inmensidad de aberraciones estando al aire (son cosas muy diferentes aunque parecidas) el hablar no es solo dar a lucir mi “espectacular” voz ante los demás, es hablar dándole sentido a lo que expreso, sin utilizar palabras extremadamente extrañas y nuevas que no permitirán que lo que expreso se entienda, ni vocablos jergueros y/o groseros; es adaptarme al tipo de receptor que recibe mi mensaje. Eso hará nuestra voz más cálida, y nos acercará al oyente lo que hará que tengamos mayor aceptación de este.

Nosotros como comunicadores sociales debemos saber observar en nuestro alrededor a la cultura y costumbres a las que nos enfrentamos, darnos cuenta cual es el tipo de audiencia al que nos dirigimos, que palabras usa, como se conduce, puesto que la verdadera comunicación no comienza hablando comienza escuchando. Por eso la primera característica de un buen comunicador social es saber escuchar.

En la radio existen tres tipos de voces, la humana, que expresa las palabras, la voz de la naturaleza, que se expresa a través de los efectos de sonido y la voz del corazón que es expresada a través de la música, son imprescindibles las tres porque juntas compactan la imaginación, emoción y razón del receptor; para llegar a este con mayor fuerza y captar su atención hay que saber utilizar las tres de manera que la conducción del programa sea agradable y la audiencia se sienta seducida por el locutor.

Para lograr esto el locutor tiene que saber utilizar palabras coloquiales, es decir, que el público pueda captar con facilidad, es decir un lenguaje estándar, puesto que si nos llenamos de vocablos rebuscados, el público se sentirá inferior y el mensaje no será trasmitido óptimamente.

Claro está que para que nuestro sea completamente captado por la audiencia tenemos que sectorizar a la misma, es decir que si tenemos pues a un grupo de madres, adolecentes y niños de 3 o 5 años no les podemos dar a todos un mismo programa ( a no ser que todos ellos sean miembros de una misma familia y el programa sea netamente familiar, lo cual también implicaría hacer un estilo distinto en el espacio del programa para cada miembro de la familia) es por esto que nuestra audiencia puede ser divida en sectores como educativo, populares, infantiles, juveniles y para adultos o también en sectores a-b , b-c, c-d, estos últimos son netamente trabajados para trasmitir programas dirigidos a determinados públicos socio-culturales.

La valoración de este público es demostrada a través sondeos por medio de la misma radio y esto permite ver el agrado de aceptación o rechazo del público con respecto a los programas radiales.

Para comprobar si los locutores de nuestra localidad – Chiclayo, Perú – decidimos preguntar a algunos locutores como es que trabajan el tema de la valoración del la audiencia al momento de traducir radiofónicamente al micro. Hablamos con Michael Gallardo locutor de radio La Karibeña (http://karibenafm.galeon.com/) Pepe Zulueta de la misma radioemisora y con Ivan Bravo de Studio 92 (http://radio.studio92.com/ciudadchiclayo/) Coincidieron todos ellos en la idea de que su trabajo en la radio está proyectado meramente a la idea de entretener a su audiencia, al momento de locutar se introducen en el papel de sus radioescuchas y adoptan la cultura de su sector de audiencia, es decir hablan el mismo lenguaje de sus radioescuchas… y se enfocan en un solo sector por ejemplo Pepe Zulueta esta enfocado en el sector familia, ósea su programa está dirigido especialmente a las madres de familia y habla cosas de cocina o cosas que atraigan a este sector. Cosa que es muy diferente con Ivan Bravo quien se dirige a un público joven y trata de hablar como ellos, en ocasiones se excede y hasta suelta una que otra pachotada o grosería.

Pero veamos que nos dicen ellos mismos en las siguientes entrevistas:

http://www.youtube.com/watch?v=OH1jh29in7Y

http://www.youtube.com/watch?v=zuOkVhFMVYQ